Acamapichtli: Puñado de carrizos
Acatl: Carrizo, caña, junco. Rojo.
Acatzin: Pequeño carrizo
Acaualxochitl: Flor arrojada por el agua
Acoatl: Serpiente de agua
Ahuizotl: Mamífero acuático
Alotl: Fuacamaya
Ameyal: Manantial
Ameyaltzin: Pequeño manantial
Anáhuac: Ribera u orilla del agua
Aquetzalli: Agua preciosa
Atl: Agua
Atlacatl: Marinero
Atlanxochitl: La más bella flor del mar
Atototzin: Agua convertida en ave
Atzin: Agua venerable
Auachtli: Rocío
Axayacatl: Rostro de agua
Ayauhtli: Niebla
Azcatl: Hormiga
Aztlan: Blancura
Ceyaotl: Uno guerrero
Cihuatl: Mujer
Cihuacoatl: Mujer serpiente
Cihuapipiltzin: Mujer honrada
Cihuateopixqui: Mujer sacerdotisa
Cihuaxochitl: Mujer flor
Cinteotl: madre del maíz
Cipactli: Caimán
Citlalcóatl: Serpiente de estrellas
Citlalinicue: Falda de estrellas
Citlalli/Citlalin: Estrella. Luna
Citlalmina: Flecha de las estrellas (meteoros)
Citlaltonac: Estrella resplandeciente
Citlaltzin: Estrellita
Citlaxóchitl: Estrella que se convirtio en flor
Cóatl: Serpiente
Coatlaxopeuh (Guadalupe): Aguila que aplastó a la serpiente
Coatlicue: Falda de serpientes
Coatzin: Pequeña serpiente
Coyolli: Cascabel
Coyoltzin: Pequeño cascabel
Coyolxauhqui: Señora de los cascabeles (Luna)
Cozcaapa: Agua de piedras preciosas
Cuauhcihuatl: Mujer águila
Cuauhtémoc: Bajada del águila, águila descendente
Cuauhtleco: Águila que asciende
Cuauhtli: Águila
Cuauhtzin: Águila venerable
Cuetlaxochitl: Flor de río
Cuicacani: Cantor
Cuicatl: Canción
Chalchiuitl: Flor de fuego
Chimalma: Escudo yacente
Chalchiuitl: Flor de fuego
Chalchiuhtlicue: Falda de jade
Chalchiuxóchitl: Turquesa convertida en flor
Chicomecoatl: Siete serpientes
Chichilkuali: Águila roja
Chimalcóatl: Escudo de serpientes
Chimalli: Escudo
Chimalma: Escudo yacente
Ehécatl: Viento
Hiuhtonal: Luz preciosa
Huitzillin: Colibrí
Huitzilihuitl: Pluma de colibrí
Huitzilopochtli: Colibrí izquierdo, colibrí del sur
Ilhuicamina: Flechador del cielo
Ilhuicóatl: Serpiente celeste
Ilhuitemoc: El que desciende del cielo
Ilhuitl: Cielo
Imacatlezohtzin: La que ofrece mucho cariño
Ixcatzin: Como algodón
Ixtlixóchitl: Cara de flor
Ixualxochiotl: Planta de muchas flores
Izel: Única
Itzmin: Trueno
Itzpapálotl: Mariposa negra
Itzcoatl: Serpiente negra
Itzcuauhtli: Águila blanca
Iztacoyotl: Coyote blanco
Iztapapalotl: Mariposa blanca
Iztaxóchitl: Flor blanca
Iztlacihuatl: Mujer blanca
Iztli: Obsidiana, negrita
Macuilxochitl: Cinco flores
Malinalli: Hierba
Malinaltzin: Hierbecita
Malinalxóchitl: Flor de malinalli
Matlalcóatl: Serpiente-venado
Maxóchitl: Ramo de flores
Mayahuel: La de la planta del maguey
Mazacoatl: Serpiente-venado
Mazatzin: Venadito
Metztli/Mextli: Luna
Mexitli/Mexi: Liebre de aloe
Miquiztli: Reposo, quietud, muerte
Mixcoatl: Serpiente de nube
Mixtli: Nube
Mixtle: Nube oscura
Miztli: Puma
Motecuhzoma (Moctezuma): Tu señor enojado
Moyolehuani: Enamorado
Nahui: Cuatro, cuarto
Necucyaotl: Guerrero por ambos lados
Nelli: Verdad
Nezahualcóyotl: Coyote que ayuna
Nezahualpilli: Niño que ayuna. El jefe hambriento
Nicté: Flor
Noxochicoztli: Collar de flores
Ocatlana: Piedra que gira
Ocelocóatl: Ocelote-serpiente
Ocelotl: Jaguar, ocelote
Ohtonqui: Caminante
Omecatl: Dos juncos
Olontetl: Piedra que gira
Ollin: Movimiento
Opochtli: El de la mano izquierda
Painalli/Painal: Mensajero, el de los pies muy rápidos
Papalotl: Mariposa
Papantzi: Señora mariposa
Pelaxilla: Copo de algodón
Quecholli: Flamenco, flamingo
Quecholliquetzal: El flamenco más bello
Quetzal: Pluma hermosa
Quetzalcóatl: Serpiente emplumada
Quetzalli: Preciosa
Quetzalxilotl: Primoroso jilote
Quetzalzin: Pequeña bella
Quiahuitl: Lluvia
Quiahuitzin: Lluviecita
Tecolotl: Búho
Tecpalotl: Guacamaya de pedernal
Tecpatl: Pedernal
Teotl: Energía, dios
Teoxihuitl: Turquesa divina, preciosa
Tepeyolotl: Corazón de los montes
Tepiltzin: Hijo privilegiado
Tepochtli: Joven guerrero
Tezcatl: Espejo
Tezcatlipoca: Espejo que humea
Tezolpiliyolotl: Corazón muy dulce
Tizitl: Médico
Tlacaelel: El que levanta el ánimo, persona diligente
Tlahcuilo: Pintor, escritor
Tlanextic: Luz poniente
Tlanextli: Brillo, radiante, esplendor
Tlayolohtli: Corazón de tierra
Tlazohtlaloni: Hombre, forma masculina
Tlazohtzin: Quien es amado
Tlecóatl: Serpiente de fuego
Tlecuauhtli: Águila de fuego
Tlexochitl: Flor de fuego
Tleyotl: Corazón de fuego
Tzilmiztli: Puma negro
Tzitzitlini: Campanitas. Flor
Tochtli: Conejo
Tonahuac: Único de la luz, posesiva
Tonalli: Energía, día, calor
Tonalna: Madre de la luz
Tonantzi: Nuestra madrecita
Tonatiuh: Sol, el luminoso, el que calienta
Topiltzin: Nuestro niñito, nuestro príncipe
Ueman: Venerable tiempo
Uetzcayotl: Esencia de la luz
Xalaquia: La que está vestida de arena
Xicohtencatl: Jicote enfurecido
Xihuitl: Cometa
Xilonen: Mazorca de maíz
Xiuhcóatl: Serpiente de fuego, serpiente turquesa
Xiuhuitl: Turquesa
Xiuhxochitl: Flor turquesa

Fuente(s):


Para niña tengo los siguientes:

Itzel..........Lucero del amanecer
Saknikté...Blanca Flor
Nikte-Ha....Sol de agua
Yohatzin....Mujer de combate
Yaakunah.. Amor
Yaakun...... Amar
Nikte..........Flor
Sáastah..... Amanecer
Yaretzi........Siempre amada
Itayetzi........ Espiga dorada
Ixchel.......... Güerita ( compuesto de Ix = pequeño, ( a ) y Chel = güero ( a )
Zacbé...........Camino blanco
Naybi............Sueño
Uh................ Luna
Yalit.............. Flor de maíz
Yahani.......... Laguna en el paraíso
Yococzin....... Mujer de corazón tierno
Unenil Ich....... Espejo
Toktunich........ Pedernal
Canek.............Serpiente negra
Balam............ Jaguar

Notas Importantes

¿Qué es un parto respetado?


Todas las actividades que se realizan en el marco de la Semana del Parto Respetado están vinculadas a la concientización acerca de los derechos de las mujeres a la hora de dar a luz, y la importancia de garantizar nacimientos seguros, naturales y durante los cuales la madre goce de absoluta libertad. El parto respetado es un parto donde la prioridad es la libertad de movimiento y postura, respetando la fisiología femenina dando el tiempo que necesite para el nacimiento.
Cuando hablamos de humanizar estamos hablando de la necesidad de devolverle al nacimiento su verdadero sentido, protagonizado por la mujer que pare, el hijo/a que nace y el hombre que acompaña, respetando los tiempos de la naturaleza que son distintos en cada mujer, y cuando los verdaderos protagonistas viven este momento con la entrega que se requiere, la intervención de las/os profesionales, será solo de acompañar sin intervenir.
Dar a Luz plenamente es posible si le devolvemos a la mujer la seguridad perdida, preparándola para un nacimiento en un lugar que ella escoja y que le de seguridad, rodeándola de un ambiente cálido, acompañada por las personas que forman su núcleo de amor y amistad y dejándola asumir la tarea de acuerdo a sus creencias y necesidades.
La institucionalización de los partos ha hecho que se sistematicen una serie de controles y procedimientos sobre la mujer y el bebé sin evaluar el estado de salud de cada individuo y sus necesidades particulares, transformándose en rutinas; que suelen ser molestas, dolorosas y potencialmente riesgosas aplicándose sin justificación científica por costumbre del equipo de salud o que sigue pautas que no han sido revisadas y actualizadas.
El proceso del trabajo de parto y nacimiento es diferente en cada mujer y cada bebé, es diferente en los aspectos tanto físicos como emocionales, diferente en su desarrollo temporal. Es necesario respetar el tiempo que cada mujer y cada bebé necesita para parir y nacer.
Fuente: Relacahupan
(Red Latinoamericana y del Caribe para la Humanización del Parto y Nacimiento)