-- MARQUISE DE CHOCOLATE-(receta solicitada x.Noelia galera)

200 grs. chocolate amargo.
180 grs. de manteca .
100 grs. de azúcar .
150 grs. crema de leche .
3 huevos .
cubierta:
500 grs. dulce de leche repostero.
200 grs. crema de leche .
chocolate negro ralladodo grueso.






Fundir a baño de María el chocolate con la crema, el azúcar y la manteca. Retirar del fuego e ir agregando los huevos de a uno, batiendo bien después de cada adición.
Verter en un molde de 22 cms. de diámetro, forrado con papel aluminio, enmantecado y enharinado.Cocinar en horno a temperatura media 180º, por 30 minutos. Retirar y dejar enfriar.
cubierta:
Rellenar la marquise con el dulce de leche; batir la crema a punto chantillí y extenderla sobre el dulce de leche y decorar con el chocolate rallado.

Es importante usar dulce de leche repostero, es más consistente y a la hora de cortar el postre no se desparrama.
Una vez hecha la marquise dejarla que se enfríe por lo menos 3 hs. antes de agregar la cubierta, ya que al sacarle el papel
aluminio puede romperse fácilmente.
Si se desea en vez de chantilly se puede decorar con merengue.
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Notas Importantes

¿Qué es un parto respetado?


Todas las actividades que se realizan en el marco de la Semana del Parto Respetado están vinculadas a la concientización acerca de los derechos de las mujeres a la hora de dar a luz, y la importancia de garantizar nacimientos seguros, naturales y durante los cuales la madre goce de absoluta libertad. El parto respetado es un parto donde la prioridad es la libertad de movimiento y postura, respetando la fisiología femenina dando el tiempo que necesite para el nacimiento.
Cuando hablamos de humanizar estamos hablando de la necesidad de devolverle al nacimiento su verdadero sentido, protagonizado por la mujer que pare, el hijo/a que nace y el hombre que acompaña, respetando los tiempos de la naturaleza que son distintos en cada mujer, y cuando los verdaderos protagonistas viven este momento con la entrega que se requiere, la intervención de las/os profesionales, será solo de acompañar sin intervenir.
Dar a Luz plenamente es posible si le devolvemos a la mujer la seguridad perdida, preparándola para un nacimiento en un lugar que ella escoja y que le de seguridad, rodeándola de un ambiente cálido, acompañada por las personas que forman su núcleo de amor y amistad y dejándola asumir la tarea de acuerdo a sus creencias y necesidades.
La institucionalización de los partos ha hecho que se sistematicen una serie de controles y procedimientos sobre la mujer y el bebé sin evaluar el estado de salud de cada individuo y sus necesidades particulares, transformándose en rutinas; que suelen ser molestas, dolorosas y potencialmente riesgosas aplicándose sin justificación científica por costumbre del equipo de salud o que sigue pautas que no han sido revisadas y actualizadas.
El proceso del trabajo de parto y nacimiento es diferente en cada mujer y cada bebé, es diferente en los aspectos tanto físicos como emocionales, diferente en su desarrollo temporal. Es necesario respetar el tiempo que cada mujer y cada bebé necesita para parir y nacer.
Fuente: Relacahupan
(Red Latinoamericana y del Caribe para la Humanización del Parto y Nacimiento)