Smith perdió 65 libras
Cuando Jill Smith golpeó 220 libras después del nacimiento de su hijo, ella se dio cuenta de que para ella ser la mejor mamá que ella podía ser, que tenía que cambiar. "Sabía que tenía que dar el ejemplo adecuado para él crecer, lo que significaba que necesitaba para llegar a mi peso y los hábitos alimentarios, junto con la falta de ejercicio, bajo control", dice.
Jill primer paso fue buscar correctamente en su dieta, para que ella pudiera evaluar la cantidad de calorías que comía frente a la cantidad que realmente se necesita, y para encontrar alternativas más saludables de lo que estaba comiendo. Luego tuvo que cambiar su modo de pensar acerca del ejercicio que no se vale la pena molestarse con menos había un total de 30 minutos para hacerlo.
"Como nueva madre, un total de 30 minutos es difícil de conseguir. Yo sabía que el trabajo por lo menos 30 minutos es más beneficioso que sólo unos 10-15 minutos, pero los 10-15 minutos puede contar todavía! Yo hice mi mantra de que "más es mejor que menos, pero menos es mejor que nada!" y se fue de allí ", dice ella," el paso del tiempo, me pareció más fácil y más fácil trabajar en los pocos trabajos de las sesiones, incluso incluyendo a mi hijo como la resistencia en algunos! "
"Romper los viejos hábitos y encontrar tiempo para mí fueron mis mayores retos", dice Jill, "A veces parecía mucho más fácil para salir corriendo a agarrar un bocado para comer en un restaurante de comida rápida que para cocinar una comida fresca, o de fácil excusas sobre por qué no podía ejercer en cualquier día dado. "Cuando lo hizo trampa, ella dice que fue duro para volver en la ranura de las cosas.
Cosechar los beneficios
Jill comenzó a notar los resultados inmediatamente después de realizar cambios en su dieta y aumentar el ejercicio en su día, especialmente en términos de cómo se sentía acerca de sí misma. "Los cambios físicos llegaron 2 meses, empecé a notar la ropa siente más suelto, es un momento agridulce cuando sus pantalones favoritos ya no mantenerse", dice.
Desde que perdió el peso, Jill dice que se siente más ligera tanto emocional como físicamente. Todavía hay días en que las luchas, pero en general Jill dice que ella sólo se siente bien en su propia piel.
